En medio de la cotidianidad doméstica e industrial, con el fin de facilitar la cocción de alimentos, tienes la opción de cocinar con gas butano o propano, combustibles resultantes de la refinación del petróleo, proceso que lo convierte en gas licuado del petróleo (GLP), con gran capacidad energética.
A continuación...
¿Butano o el propano para cocinar?
Para resolver el dilema y elegir qué tipo de gas utilizar, es conveniente que tomes en cuenta ciertas recomendaciones basadas en parámetros de eficiencia, disponibilidad y economía de ambos tipos de gas:
- Comúnmente, el butano se encuentra disponible en cilindros o bombonas de hasta 12 kilos, pero en el caso del gas propano, es posible encontrarlo en envases de hasta 35 kilos.
- El butano es ideal para la cocina de una vivienda, mientras que el propano está indicado para inmuebles de grandes dimensiones, tales como, hoteles, restaurantes, industrias, etc.
- El gas butano requiere de una temperatura de cero grados para alcanzar su punto correcto de rendimiento (excelente para climas templados) mientras que el gas propano genera óptimo rendimiento desde los -44 grados centígrados (perfecto en climas de frío intenso).
- La diferencia más destacada entre estos dos gases es su valor. Una bombona de butano es más económica que una de propano.
El uso permanente de cualquiera de estos dos gases, no representan riesgo alguno hacia los seres vivos, no son elementos tóxicos, su acción contaminante es baja y no afecta el medio ambiente. Su instalación para el consumo exige un manejo seguro y responsable de las conexiones y de los componentes que se requieran para uso, ya sea doméstico o comercial, que debe ser realizado por personal cualificado. Es imperante que las instalaciones de gas deban ser revisadas y controladas cada 5 años con el fin de evitar, con este mantenimiento preventivo, riesgos de fugas generados por sistemas en mal estado.
¿Es más barato cocinar con luz o con gas?
En cuanto al coste de cocinar con luz o gas, siendo el gas y la electricidad, servicios básicos imprescindibles en esta era moderna, surge la interrogante a dilucidar: ¿cuál de estos servicios es más económico al momento de cocinar los alimentos que se requieren?
Varias facetas dan respuesta a la interrogante planteada. De primera mano, se tiene que, cocinar con electricidad genera un consumo elevado de luz, por consiguiente, los costos de este servicio se incrementan en un rango considerable. En segundo orden, para cocer alimentos mediante el fluido eléctrico, se requiere que no existan cortes de luz, pues esto imposibilitaría el uso de la estufa.
De otra parte, cocinar mediante el uso de gas natural o doméstico, significa que se gastará solo si se utiliza y que siempre estará disponible de acuerdo al uso otorgado; cabe resaltar que, generalmente,, las cocinas a gas poseen un mayor precio que las parrillas utilizadas en las estufas eléctricas. En realidad, la decisión de cuál tipo de energía utilizar depende primordialmente del lugar donde resida y de las necesidades de la familia.
Principales ventajas de cocinar con gas butano
A nivel mundial, es frecuente que se utilicen bombonas o cilindros en muchas zonas que no posean o no cuentan con acceso a gas natural por medio de tuberías directas a los hogares, y es donde el gas butano es una alternativa transportable y benéfica para las poblaciones.
- Posee un gran rendimiento. Calentará más rápido quemando menos cantidad de gas.
- Precios económicos. El precio del butano es variable de acuerdo al mercado, pero, aun así, su precio es bajo.
- Consumo controlable. Usar y adquirir el gas solo cuando sea necesario.
- Accesibilidad. Existen gran cantidad de distribuidores.
- La presentación es práctica. Los envases utilizados suelen ser más livianos y manejables. En algunas gasolineras pueden recargarse.
- Entregas a domicilio. Existen empresas dedicadas a la venta de bombonas a domicilio.
- El proceso de instalación es seguro y muy fácil. Solo se deben cumplir las normas de seguridad. Como un extra, al gas butano se le adiciona un aditivo con un fuerte olor para detectar posibles fugas.
- Facilidad si se desea cambiar de tipo de gas. El consumidor puede cambiar a cualquier tipo de gas cuando desee, pues las instalaciones de gas butano son compatibles con el gas propano.
Inconvenientes de cocinar con gas butano
- Es un gas inflamable. No se recomienda el almacenamiento de más de 2 cilindros en el hogar.
- El butano es más contaminante en comparación con el gas natural, y con otras opciones, como placas solares.
- Capacidad limitada. En cualquier momento puede quedarse sin suministro.
- Adquisición constante. Cada vez que se termine el gas, se debe hacer su adquisición.
Como acápite final, debes saber que cocinar con gas butano se presenta como ideal para consumos domésticos, como energía para calefacción, cocina o caldera de gas. Sin embargo, los usos del propano suelen ser más profesionales, de hecho, este tipo de gas es comúnmente utilizado en restaurantes e industrias.
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